Meditaciones sobre la ira.

Os dejo abajo la transcripción de esta meditación de un cd de Swami Paramarthananda.

«Uno de los problemas más serios al que todos nos enfrentamos es la ira. Los problemas externos van y vienen, son, normalmente, temporales. Sin embargo, la ira es un problema interno que permanece con nosotros todo el tiempo. La ira es un problema serio ya que sus consecuencias negativas son muchas. No sólo sufre la persona airada sino que también lo hace la víctima de la ira. Y este dolor no es momentáneo, persiste durante un largo periodo de tiempo. Nos inmoviliza y no somos capaces de operar durante largos periodos de tiempo. Debido a la ira, se desarrolla el odio y éste puede romper incluso las relaciones más íntimas. Las amistades y las relaciones se desarrolla durante muchos años y se pueden destruir en un momento de rabia. Una vez que una relación se ha roto, es muy difícil arreglarla y reconstruirla.

En los momentos de cólera hablamos y nos comportamos de forma desconsiderada e irreflexiva, sin ningún tipo de discernimiento y, a menudo, hay un arrepentimiento más tarde. Además, la cólera destroza el ambiente sereno y apacible, y por tanto, obstruye el desarrollo espiritual. Sin ningún lugar a dudas, la cólera es un enemigo muy fuerte dentro de nosotros.

Esta ira o cólera es una señal de debilidad. Refleja la incapacidad de encarar situaciones difíciles. Así, la ira es un síntoma de una mente debilitada. Si se quiere abordar la ira, primero debemos reconocer el problema y aceptar esta debilidad. Debo de admitir mi incapacidad. Desafortunadamente, he estado justificando mi ira culpando a otros, su comportamiento, sus palabras. Cuando justifico mi debilidad, cierro las puertas para la mejora, para superar esta debilidad.

Una vez se admite esta debilidad, puedo fortalecer la mente mediante saṇkalpaśati, mediante el poder de la autosugestión. Me contemplo como una persona fuerte que puede encarar las situaciones sin estar perturbado. Me contemplo como una persona con kṣamā, una persona que perdona kṣamā es la medicina para la ira y, así, me siento como kṣānta. Soy fuerte. No estaré irritado por las situaciones. No seré provocado por las personas. No tengo control sobre el comportamiento de los otros pero puedo elegir estar calmo. No puedo ser provocado o irritado.

Śāntaḥ aham

Śāntaḥ aham

Śāntaḥ aham»

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