El señor es la causa material, el soporte de todo el universo. Verso ocho del Atmabodha.

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Verso ocho del ātmabodha

upādane’kholādhāre jaganti parameśvare
sargasthitilayānyānti budbudānīva vāriṇi

Como las burbujas en el agua, los mundos atraviesan la creación, la existencia y la disolución en el Señor, que es la causa material, el soporte de todo.

 

upādāna, causa material , atravesar
akhila-ādhāra, soporte de todo bubbuda, burbuja
jagat, mundo, universo, ser vivo. movil vāri, agua
parama-Īsvara, el Señor supremo
sarga-shiti-laya, creación, existencia, disolución

 

Śaṅkara señala que el Señor (Īśvara) es el upādanām-kāraṇam (la causa material) y la causa eficiente (nimitta-kāraṇam). Igualmente, en el sueño, el que está despierto (en estado de vigilia, the «waker») es la causa material y eficiente de cada objeto en el sueño; el objeto en el sueño no existe separado del que está soñando, es decir, del que está despierto durmiendo en la cama (the «waker»), del creador del sueño. Soy el upādanām, la causa. Como el océano y la ola. Ambas son una proyección. Tienen existencia fenoménica pero no existen por sí-mismas. En las dos lo real es el agua. La ola no es nada más que agua. A ambas les damos un nombre y forma (nāma-rūpa) pero si analizamos su esencia, no son más que agua. El agua es la causa. La ola y el océano son agua.

De forma similar, el Señor es el upādanām (la causa) de todo el macro-universo; Es el soporte, sarvā-adhiṣṭhāna , de todo este universo incluyendo el espacio y el tiempo. Es increíble. De forma similar, el mundo soñado se manifiesta, se sostiene y resuelve en el que está en estado de vigilia (the waker). Igualmente en el Señor (Īśvara) se manifiesta, se sostiene y se resuelve el universo.

Soy el Brahman, la causa de la creación y resolución, srsti-laya karāṇam, de este mundo. Aham Brahman asmi. En verso dice: upādāne, akhila-ādhāre parameśvare. ¿Quién es parameśvare (parama-Īśvara)? El nombre que doy a la totalidad, el Señor.

Las tres palabras están declinadas en locativo. Hay que suplementar el adjetivo mayi (en mi). ¿Qué está en el señor? Los mundos (jaganti, en plural) tanto manifestados como inmanifestados; Los mundos atraviesan la creación, existencia y disolución (sarganti-shiti-layān); Se incluyen los sistemas solares, galaxias, todo lo conocido y por conocer. Sarga es creación. Estos universos tienen lugar en el Señor. El Señor y yo compartimos la misma esencia, a pesar de las diferencias aparentes. ¿Y cuanto de grande debo ser? Mi asunción es que soy un punto en el universo. Cada galaxias es una agrupación de billones de estrellas, y existen millones de galaxias, y una galaxia es, por ejemplo, la Vía Láctea que tiene millones de estrellas; una de esas estrellas es el sol y alrededor de esa estrella hay varios planetas, y uno de esos es la tierra. Existen los continentes, países, comunidades, ciudades, pueblos, calles, edificios, habitaciones, y en una esquina de la habitación estoy sentado. Imagina la magnitud del universo y tu magnitud. ¿Cuál es nuestra conclusión? Que soy un pixel en el universo. Y, sin embargo, vēdanta dice que soy la totalidad del cosmos. Es difícil de asimilar porque enseña algo que es diagonalmente opuesto a lo que hemos estado asumiendo toda nuestra vida. En el ejemplo del verso, las galaxias son una burbuja. ¿Y quién soy yo? Soy el agua «más» la burbuja pero la burbuja no está separada del agua. La burbuja no es más que agua. La burbuja no es más que un nombre y una forma cuya existencia es dada únicamente por el agua. Una galaxia puede sobrevivir millones de años pero desde el punto de vista de la infinidad, ¿qué es? Las burbujas aparecen y desaparecen. El ejemplo de la burbuja involucra dos cosas: la limitación en tiempo, y en espacio. ¿Cuál es la duración de la existencia de una burbuja? Sólo unos segundos. Similarmente, las galaxias pueden existir millones de años pero desde el punto de vista de la eternidad son sólo una chispa centelleante.

Hay una anécdota en la que se dice que unos devas (deidades) estaban en satsaṅga (en compañía de los que escuchan y asimilan la verdad) y escucharon un ruido tremendo. No os preocupéis. Ha nacido Ravana (el rey de los demonios) —exclamó uno de ellos—. Otra vez se escuchó un sonido terrible. No os preocupéis. Ravana ha muerto.

Lo que consideramos como algo terrible que sucede en la vida, desde la infinitud no es más que un destello. Si los problemas afectan, una solución es elevarse a la visión del ser que es verdadero. El objeto del vēdanta es cambiar la perspectiva de estos puntos de vista.

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